Un Matrimonio Supera Barreras Migratorias: Una Saga en 3 Partes
Parte 1: Cuando el Amor No Es Suficiente—Dijeron que Su Matrimonio No Era Real
¿Alguna vez te has preocupado de que un pequeño error en tus trámites migratorios pudiera arruinar el futuro de tu familia? Eso casi les pasa a Mory y Sandra.
Cuando Mory Conoció a Sandra
Mory llegó a Estados Unidos desde Senegal con poco más que determinación y esperanza. Trabajaba largas horas en empleos que le exigían físicamente todo, trabajos que otros evitaban. Pero no se quejaba. Para él, cada gota de sudor era una inversión en un futuro mejor.
Entonces conoció a Sandra. Ella había tenido su propia experiencia como inmigrante a los Estados Unidos, habiendo emigrado de la República Dominicana años antes y obteniendo la ciudadanía estadounidense. Al principio, le divirtió el esfuerzo de Mory por aprender español solo para conectar con su cultura. Pronto, se conmovió por su amabilidad, resiliencia y la forma en que la hacía reír incluso cuando la vida le pesaba.
Sandra tenía 50 años y tuvo que dejar su trabajo para cuidar a su madre, quien había enfermado gravemente. El único constante de alegría en su vida era Mory, cuya devoción nunca flaqueó, a pesar de ser 10 años menor. Así que, cuando él le propuso matrimonio, ella no dudó en aceptar.
Pero el Amor no fue Suficiente para USCIS
Poco después de casarse en el otoño de 2014, comenzaron el proceso de Mory para solicitar la residencia permanente legal basada en su matrimonio con una ciudadana estadounidense. Sandra ya había pasado por su propio proceso de inmigración y, como contaban con fondos limitados, recurrieron a un notario para preparar sus documentos. Cuando llegaron a la entrevista con el oficial de inmigración, su caso carecía de la mayoría de las pruebas financieras importantes que generalmente se requieren para su aprobación (es decir, impuestos conjuntos, registros bancarios, contratos de arrendamiento, seguros, etc.). Su caso fue débil desde el principio.
Meses después, investigadores llamaron a su puerta. Interrogaron al dueño de su apartamento, con quien Sandra nunca había tenido contacto, y a vecinos que ella apenas conocía. Vecinos que rara vez la veían porque pasaba la mayor parte del día al lado de su madre enferma.
Los investigadores descubrieron otras pruebas de agencias gubernamentales que respaldaban su conclusión de que el matrimonio era fraude migratorio. Sandra no había actualizado su dirección en su licencia de conducir en el Registro de Vehículos Motorizados, por lo que figuraba una dirección diferente a la de su esposo y domicilio conyugal.
Además, los registros tributarios del IRS mostraban que la pareja no había presentado sus impuestos “conjuntamente”, durante su primer año de matrimonio, porque la persona que preparó los impuestos de Sandra pensó que no podían presentarlos conjuntamente, ya que ellos no habían estado casados
Recepción de una Solicitud de Evidencia (RFE) y una Notificación de Intención de Negación (NOID)
En 2017, el USCIS emitió una Solicitud de Evidencia (RFE) solicitando información para refutar la evidencia negativa que los investigadores habían recopilado. El documento era complicado y difícil de entender y responder para Sandra y Mory sin asistencia legal, así que simplemente hicieron lo mejor que pudieron. Desafortunadamente, esto empeoró las cosas.
La persona que preparó su solicitud inicial les dijo que simplemente enviaran los registros de su cuenta bancaria conjunta y fotografías, y como tenían ambas, esto fue lo que enviaron. No sabían que las fotografías tienen poco valor como prueba en estos casos, y dado que su cuenta bancaria conjunta solo tenía el sueldo de Mory depositado y ninguna transacción de Sandra, esto solo perjudicaría su caso.
Para 2018, USCIS había construido un caso que pintaba el amor de Sandra y Mory como una farsa. Emitieron una Notificación de Intención de Negación, amenazando con desmantelar todo lo que la pareja había construido.
¿Sobreviviría su vínculo a un sistema que parecía decidido a destruirlo?
Si usted o un ser querido ha recibido una denegación o se siente estancado en el proceso de inmigración, no se rinda, tal vez podamos ayudarle. Contacte hoy mismo con FitzGerald Law Company y programe una consulta con uno de nuestros abogados de inmigración matrimonial al 617-303-2600 o complete una solicitud de consulta en línea.
Parte 2: Llevando la Lucha a los Tribunales—Un Matrimonio Bajo Ataque
¿Qué haría si el gobierno se negara a creer que su matrimonio es real, sin importar cuántas pruebas les presentara?
Comenzando de Nuevo
Para cuando Mory y Sandra fueron referidos a los abogados de inmigración de FitzGerald Law Company, estaban exhaustos. Años de sospechas, llamadas a la puerta por investigadores y noches de preocupación por perderse el uno al otro les habían dejado marcados.
El abogado FitzGerald sabía que su mejor alternativa era retirar el antiguo caso de residencia matrimonial sin fundamento y comenzar de cero con una nueva solicitud de residencia por matrimonio I-130. Con la orientación de nuestro equipo, la pareja reunió todo lo que tenía: seguro médico conjunto, licencias de conducir con su dirección compartida, cuenta bancaria conjunta con depósitos directos del empleador con un historial del uso de la cuenta para pagar sus facturas, seguro médico, historiales médicos e impuestos conjuntos—prueba de una vida construida juntos, paso a paso. Presentaron la nueva solicitud y confiaban en que esta vez la verdad prevalecería.
Pero USCIS se negó a olvidar el pasado. En lugar de sopesar la montaña de pruebas nuevas, se aferraron a los errores y deficiencias de la primera solicitud y, una vez más, emitieron una Notificación de Intención de Negar (NOID) su caso.
El abogado FitzGerald se opuso a esto con un Memorando legal donde explicaba por qué USCIS debería centrarse en la nueva solicitud, en lugar de la anterior, y proporcionó copias actualizadas de los registros financieros. El USCIS pasó por alto todas las nuevas pruebas y, de todos modos, Negó la petición.
Manteniendo Válido el Permiso de Trabajo
Sandra y su esposo estaban devastados. Mory se enfrentaba a la cancelación de su permiso de trabajo, que necesitaban para sobrevivir, por lo que el abogado FitzGerald les aconsejó presentar una “apelación administrativa” ante la Junta de Apelaciones de Inmigración, lo que le permitiría seguir trabajando legalmente.
Este debería haber sido un caso sencillo. La pareja llevaba años reuniendo pruebas para respaldar su matrimonio, por lo que no había ninguna razón lógica para mantener la Negación. Desafortunadamente, su apelación continuó en espera durante años sin una decisión.
Agotados, pero no destrozados, la pareja preguntó si había algo más que pudiéramos hacer. En ese momento, nuestro equipo legal decidió aconsejarles que dieran un paso audaz y presentaran un “Writ of Mandamus” (demanda en un Tribunal Federal) contra el USCIS y el Departamento de Seguridad Nacional. Sería costoso, largo y difícil, pero para Mory y Sandra, que creían en su matrimonio y en la justicia, esto valía la pena.
Parte 3: Después de 10 años… ¡Justicia al Fin!
Después de 10 años de denegaciones, retrasos y batallas judiciales, Sandra y Mory finalmente recibieron la noticia que tanto esperaban.
Primera Demanda al USCIS en un Tribunal Federal (Writ of Mandamus)
En 2020, tras seis años de lucha, FitzGerald Law Company presentó una demanda de Auto de Mandamus contra USCIS en un tribunal federal de Boston por demoras irrazonables en la decisión de la solicitud de residencia migratoria por matrimonio de Mory y Sandra. La Fiscalía de EE. UU. admitió que el expediente era demasiado extenso para revisarlo dentro del plazo de 60 días y solicitó más tiempo. El abogado FitzGerald recomendó conceder la prórroga, una decisión que resultó estratégica. Tras revisar el caso, la Fiscalía de EE. UU. acordó anular la denegación y devolverlo a USCIS para una nueva decisión.
En respuesta a otra solicitud de pruebas de USCIS, con la esperanza de que esto fuera suficiente, la pareja presentó más de 109 páginas de nuevas pruebas: declaraciones de impuestos conjuntas actualizadas, cuentas bancarias y registros de seguros como evidencia de un matrimonio que había resistido la prueba del tiempo, incluso bajo presiones extraordinarias. Pero el USCIS estancó el caso durante dos años, aparentemente esperando que su relación se desmoronara. Durante este tiempo, Mory no pudo viajar, tuvo que pagar por la renovación de su permiso de trabajo y no acumulaba tiempo para ser elegible para solicitar la ciudadanía estadounidense.
Cuando finalmente USCIS tomó la decisión, esta fue devastadora: el USCIS volvió a Negar la petición, alegando deficiencias en la solicitud original de 2014, en lugar de la sólida nueva evidencia presentada.
Segunda Demanda Contra el USCIS
Sin apelación administrativa disponible, los abogados de FitzGerald Law Company presentaron una segunda demanda federal (Writ of Mandamus), esta vez no basada en una demora irrazonable en la adjudicación de una petición, sino impugnando directamente la Negación errónea del USCIS de la petición I-130 para un cónyuge.
En el tribunal, el gobierno presentó el “Expediente Administrativo Certificado”, pero nuestros abogados notaron que este estaba incompleto. FitzGerald Law Company preparó y argumentó exitosamente una Moción para Ampliar el Expediente, para que el juez pudiera ver todas las pruebas del matrimonio. El abogado FitzGerald también presentó una Moción para uan Sentencia Sumaria (“Motion for Summary Judgement”), respaldada por pruebas financieras que demostraban años de convivencia. El gobierno insistió en que, dado que la ley establece específicamente que un matrimonio no puede formalizarse “únicamente” con fines migratorios, la primera solicitud era la más importante y, por lo tanto, debía prevalecer.
Justicia al Fin: Su Amor y Perseverancia Finalmente Triunfarían
El día de la audiencia, Sandra permaneció sentada en silencio en la sala del tribunal todo el día, aunque ella no estaba obligada a testificar. Su presencia fue más elocuente que palabras. Este era un símbolo de su compromiso. Todos los que observaban lo vieron: no se trataba de un matrimonio simulado, sino de una unión forjada a través del amor, la enfermedad, las dificultades económicas y años de espera. Antes de que el juez pudiera siquiera emitir un fallo, el USCIS anuló su denegación y aprobó la petición familiar I-130.
El momento fue poetico. La aprobación llegó justo cuando Sandra y Mory se preparaban para celebrar su décimo aniversario de bodas. Tras una década de miedo, incertidumbre y batallas judiciales, finalmente consiguieron lo que anhelaban: seguridad y estabilidad para su familia, y un camino hacia la ciudadanía americana para Mory.
En FitzGerald Law Company, también celebramos. Todo nuestro equipo conocía a los clientes y el caso, y habíamos trabajado arduamente en él durante tantos años. Su caso no fue solo una victoria legal, sino una prueba de que con amor, perseverancia, valentía y una defensa sagaz, la justicia es posible.
Si inmigración le ha dicho que no, no pierda la esperanza. Aún puede que haya un camino a seguir. Contacte hoy mismo con nuestro bufete de abogados de inmigración en Boston, FitzGerald Law Company, y agende uan consulta— su victoria podría ser la próxima. Llame al 617-303-2600 o complete una solicitud de consulta en línea.